15 grandes razones por las que mi novio se enfada conmigo por todo

Irene Robinson 13-08-2023
Irene Robinson

Tu novio dice que te quiere, pero tú empiezas a dudarlo, porque oye, si quieres de verdad a una persona, no te enfadarías con ella todo el tiempo, ¿verdad?

Bueno, enfadarse con alguien no significa que estés perdiendo los sentimientos por esa persona, pero aun así, definitivamente sigues teniendo un problema que debes resolver.

Aquí tienes 15 posibles razones por las que tu novio se enfada contigo por todo.

1) La fase de luna de miel ha terminado.

La fase de luna de miel suele durar entre 6 y 18 meses, cuando los efectos de los productos químicos del amor desaparecen y la pareja muestra su verdadera cara.

Tal vez esa fase haya terminado en tu relación... lo que en realidad no es malo.

Ver también: 20 señales de advertencia de que no te valora

No significa que la relación vaya a terminar pronto, sino que ahora ambos sois sinceros el uno con el otro.

Que tu novio se enfade contigo todo el rato puede que sea lo que siempre ha sido desde que nació y no tenga nada que ver contigo ni con lo que haces.

Básicamente, estás viendo a su verdadero yo, simple y llanamente.

2) Ha tenido malos modelos de conducta durante su infancia.

Podemos esforzarnos al máximo para convertirnos en lo contrario de nuestro padre, madre o tío tóxicos, pero seguiremos teniendo algunas partes de ellos en nosotros.

Puede que tenga problemas de control de la ira por genética o porque lo ve como algo normal en una relación. Y no tiene control sobre ello: ¡tiene tendencia a reflejarlos!

No es fácil desaprender y cambiar los hábitos, sobre todo si están arraigados en nosotros desde la infancia.

Si descubriste que creció en un hogar tóxico, ten un poco de paciencia. Pero él debe ser capaz de reconocer su comportamiento cuando sucede. Así es como se puede romper el ciclo.

3) No está contento con su vida actual.

Una razón bastante obvia por la que tu novio siempre está enfadado contigo es que simplemente no es feliz. Puede ser por cualquier cosa, como un trabajo insatisfactorio, unos padres molestos o simplemente está "apagado" sin motivo alguno.

Verás, si una persona es feliz, es difícil que esté siempre de mal humor. De hecho, es casi imposible.

Dígale a una persona que se le ha roto el retrete cuando acaba de recibir un premio o le ha tocado la lotería y le importará un bledo.

Pero dile eso mismo a alguien que en general no está contento con su vida y desencadenaría todo tipo de emociones, sobre todo ira y frustración.

4) Siente que está haciendo el trabajo pesado en la relación.

Él conduce, él limpia, él planea las citas y la mayoría de tus gastos salen de su bolsillo.

Debido a esto, puede que haya crecido cierto resentimiento hacia ti aunque no te lo diga explícitamente.

Este resentimiento aflorará en otras cosas como cuando se enfada contigo por no cerrar bien la puerta o por no contestar a sus mensajes cuando estás conectado.

Una parte de él odia sentirse así y a veces ni siquiera conoce la raíz de ello, pero no puede evitar sentirse así.

Siente que él lo hace todo y tú nada, lo que le hace hervir la sangre.

5) Quiere que todo salga como él quiere.

Quiere que te conviertas en una novia sumisa, alguien agradable, alguien que le permita tomar el control.

Pero tú no eres ese tipo de mujer.

Algunos hombres inmaduros se sienten ofendidos cuando su novia "cuestiona" sus opiniones y decisiones. Y quizá ésta sea la razón por la que te ladra en cuanto siente que estás a punto de llevarle la contraria.

Si sientes que este es tu novio, entonces mejor pregúntate si vale la pena.

Algunas parejas son capaces de adaptarse -¡algunos hombres cambian a mejor!-, así que debes preguntarte si le quieres lo suficiente como para ser capaz de superar su comportamiento.

6) Os habéis peleado por las mismas cosas.

Puede que la paciencia de tu novio (y la tuya también) se esté agotando porque discutís por las mismas cosas una y otra vez.

Esto puede ocurrir al principio de la relación, pero suele suceder en las relaciones duraderas, cuando ya se conocen al dedillo las manías del otro.

Si no apagas las luces cuando sales del baño aunque te lo haya dicho en repetidas ocasiones, es comprensible que se enfade.

Te sentirías igual si le has estado diciendo a tu novio que no haga algo y él lo hace como si no le importaras.

Y si piensas que esas son las únicas cosas que lo desencadenan, te equivocas.

Se enfadará fácilmente contigo por otras cosas debido a su creciente resentimiento hacia ti.

7) Estáis juntos 24 horas al día, 7 días a la semana.

La familiaridad genera desprecio.

Demasiada unión provoca aburrimiento.

En serio, ¡no es sano estar juntos todo el maldito tiempo!

Estas son duras verdades que toda pareja debería saber. Si siempre estáis el uno cerca del otro, es imposible que no os enfadéis el uno con el otro. Esta es la razón por la que hay demasiados divorcios durante la pandemia.

El simple sonido de su aliento en tu oreja o la forma en que se cepilla los dientes pueden ponerte nervioso.

Es normal. Y el remedio es fácil: aléjate de vez en cuando de la compañía del otro.

8) Es desagradecido por naturaleza.

Hay gente que es desagradecida. También suelen ser cínicos ante la vida y se quejan mucho de todo.

De nuevo, él es así.

Al principio de la relación, no te diste cuenta porque él es dulce y cariñoso contigo. Pero había señales, ¡seguro! Quizá se impacienta con el taxista, o con la gente que tiene delante en la cola del supermercado.

Tal vez también se queje mucho de cómo apestan sus padres, cómo apestan sus amigos y cómo apesta el mundo.

Ahora que está más cómodo en vuestra relación, también empieza a quejarse de ti.

Es sólo su personalidad.

Me gustaría mantener tus esperanzas altas diciéndote "puedes cambiarlo" pero prefiero manejar tus expectativas diciéndote que él es más o menos así y si lo amas, tienes que aceptar esta parte de él.

Y, por supuesto, está la terapia. Tal vez se la sugieras de forma cariñosa (y reza para que no se enfade contigo por sugerírsela).

9) Se siente cómodo descargando sentimientos negativos sobre ti.

Alain de Botton hizo un vídeo sobre por qué hacemos daño a las personas que queremos.

Dice que no suele ser malintencionado, sino que se debe a que estamos lo suficientemente seguros de la relación como para confiar en que no nos dejarán si no somos demasiado amables.

Puede que tu novio finja amabilidad con su jefe porque tiene que hacerlo, pero entonces esa rabia reprimida podría descargarse en ti.

Esto es injusto. Tienes que demostrarle que no eres un cubo de basura para sentimientos negativos.

Cuando te enfrentas a un novio gruñón, es fácil frustrarse e incluso sentirse impotente. Puede que incluso sientas la tentación de tirar la toalla y renunciar al amor.

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    Quiero sugerir hacer algo diferente.

    Es algo que aprendí del chamán de fama mundial Rudá Iandê. Él me enseñó que la forma de encontrar el amor y la intimidad no es la que nos han condicionado culturalmente a creer.

    Como explica Rudá en este alucinante vídeo gratuito, muchos de nosotros perseguimos el amor de forma tóxica porque no nos enseñan a querernos primero a nosotros mismos.

    Así que, si quieres resolver tu dinámica tóxica, te recomendaría empezar por ti primero y seguir los increíbles consejos de Rudá.

    Aquí tienes de nuevo el enlace al vídeo gratuito.

    10) Confía en que no le dejarás.

    En toda relación, hay uno que tiene más poder.

    Quizá confía en que no le dejarás porque sabe lo obsesionada que estás con él.

    O quizá porque sabe que no tienes dónde quedarte porque estás sin blanca.

    O porque sabe que eres insegura y no crees que le gustarás a otra persona.

    Demuéstrale a un hombre -o a cualquier persona en realidad- que tiene poder sobre ti y sentirá la tentación de abusar de él. E incluso los que no abusan directamente de ti, no frenarán su mal comportamiento porque saben que nunca les dejarás.

    11) Cree que le molestas a propósito.

    Algunas parejas siempre discuten y se pelean -incluso se insultan-, pero en el fondo siguen queriéndose.

    Son así.

    A lo mejor tu novio cree que le molestas a propósito y por eso se enfada contigo.

    Cree que siempre intentas presionarle para tu propio placer porque sabes que tiene la mecha corta.

    Piensa que lo haces para divertirte, y esto hace que se enfade contigo a cambio.

    12) Es profundamente inseguro.

    Si vives con un novio inseguro, cualquier cosa que digas puede ser tomada como un "ataque" a su ser.

    Bromeas sobre sus aficiones (de la forma más cariñosa posible), y él te suelta un chascarrillo. Piensa que estás insultando su capacidad como persona, como hombre.

    Le comentas que te encanta su filete pero que está un poco salado, y él te diría: "Muy bien, pues cocínate tu propia comida".

    Siempre andas con pies de plomo cuando tienes un novio inseguro. Él siempre siente que le estás faltando al respeto.

    Antes de que te gasees a ti misma, déjame asegurarte esto: ¡No eres tú, es él!

    13) Está empezando a perder los sentimientos por ti.

    No suele ser el caso, así que no se asuste.

    Pero en algunos casos, cuando una pareja empieza a ponerse gruñona cuando antes era muy paciente y dulce, es porque está empezando a desenamorarse.

    No saben cómo manejar la sensación de "no sentir nada" hacia su media naranja, así que prefieren avivar las emociones iniciando peleas. Al menos, algo hay.

    Creen que pasión = amor, incluso del tipo tóxico.

    Si ves otros signos de que está empezando a desenamorarse de ti, aborda el tema con calma antes de que sea demasiado tarde.

    14) Tus valores no están alineados.

    Puede ser algo tan sencillo como que sus valores y creencias no coincidan -o incluso choquen- entre sí.

    Por ejemplo, si eres feminista y él es antifeminista, se le pondrán los pelos de punta cuando esté contigo. Puede que sienta la necesidad de luchar por su bando en cuanto digas algo para defender el tuyo.

    Aunque lo ideal es que este tipo de conflictos salgan a la luz cuando aún os estáis conociendo, hay veces que no surgen hasta que ya sois novios o incluso os casáis.

    Y en ese momento, estará indeciso sobre si quedarse por tu bien e intentar dejar de lado sus creencias o romper contigo. Esto le genera aún más estrés, lo que explicaría por qué siempre está enfadado.

    15) Permites que te trate mal.

    Sé que no se te debería culpar de esto porque, al fin y al cabo, es tu novio el que se enfada todo el rato.

    Pero tú también contribuyes a este comportamiento, aunque sólo sea un poco.

    Si permites que tu novio se enfade contigo todo el tiempo (es decir, actúas con normalidad y frialdad como si fuera algo natural), no esperes que cambie. De hecho, espera que se comporte aún peor.

    Cómo mejorar las cosas

    1) Obtenga la orientación adecuada.

    Aunque este artículo explora las principales razones por las que tu novio siempre está enfadado contigo, puede ser útil hablar con un coach de relaciones sobre tu situación.

    Las relaciones están llenas de tensión emocional, y esa tensión puede dificultarle ver las cosas con la objetividad que desearía.

    Siempre me he mostrado escéptica ante la ayuda externa -al fin y al cabo, es mi relación, no la suya-, pero después de consultar a un profesional, cambié de opinión. Gracias a ellos, mi relación mejoró radicalmente.

    Relationship Hero es el mejor recurso que he encontrado para coaches del amor que no se limitan a hablar. Realmente lo han visto todo, y saben exactamente cómo ayudarte con cuestiones difíciles, como por qué tu novio está enfadado contigo.

    El año pasado, mientras atravesaba una crisis amorosa, probé con un coach amable, que se tomó el tiempo de escucharme y comprender mi situación, y me dio consejos que tenían en cuenta mis circunstancias personales.

    Sin conocer sus circunstancias específicas, lo mejor que puedo hacer es describirlas a grandes rasgos.

    Haga clic aquí para comprobarlo. Sólo tardará unos minutos en ponerse en contacto con un coach de relaciones certificado y obtener asesoramiento personalizado para su situación.

    2) Sé paciente pero firme en que no vas a permitir más este tipo de trato.

    Puedes escuchar consejos durante días, pero no valdrán de nada si no te enfrentas a tu novio.

    Así que intenta reservar tiempo para hablar del tema con tu novio. Va a ser testarudo, se resistirá. Por eso debes intentar ser paciente, tranquila y firme.

    Ver también: 16 señales de que un hombre casado está emocionalmente unido a ti

    Descríbele lo que te ha estado haciendo y pídele que deje de tratarte así.

    Asegúrate de que hay consecuencias si no hace lo que le pides -como romper con él- y de que estás dispuesta a asumirlas.

    3) Trabajar sobre las causas profundas.

    Pedirle simplemente que deje de enfadarse contigo todo el tiempo no lo es todo. Puede intentar contenerlo, seguro. Pero a menos que trates las causas profundas de su enfado, es una garantía de que acabará enfadándose contigo de nuevo.

    Así que también deberías preguntarle qué pasa y qué le ha llevado a tratarte así. Reconoce que puede que tú tampoco estés totalmente libre de culpa, pero al mismo tiempo no te rebajes sólo para complacerle.

    Por ejemplo, si le has estado desatendiendo, podrías hacerlo mejor e intentar prestarle más atención cuando puedas.

    Pero si su enfado se debe simplemente a que quiere ser el "amo" de la relación y no le gusta que su chica no sea sumisa, es él quien tiene que trabajar en sus problemas.

    Conclusión

    No es fácil estar en una relación con alguien que siempre está enfadado contigo, o siempre tan al límite que parece que el paso en falso va a hacer estallar una mina terrestre.

    Pero donde hay humo, hay fuego, y siempre se puede intentar echar agua a ese fuego.

    Puede que a veces necesites ayuda, y también hay ocasiones en las que los problemas son demasiado graves y no te queda más remedio que marcharte. Pero la mayoría de las veces, el problema puede resolverse fácilmente con la orientación adecuada y una comunicación abierta. Al fin y al cabo, ninguna relación está exenta de problemas.

    Irene Robinson

    Irene Robinson es una entrenadora de relaciones experimentada con más de 10 años de experiencia. Su pasión por ayudar a las personas a navegar a través de las complejidades de las relaciones la llevó a seguir una carrera en consejería, donde pronto descubrió su don para los consejos prácticos y accesibles sobre relaciones. Irene cree que las relaciones son la piedra angular de una vida plena y se esfuerza por empoderar a sus clientes con las herramientas que necesitan para superar los desafíos y lograr una felicidad duradera. Su blog es un reflejo de su experiencia y conocimientos, y ha ayudado a innumerables personas y parejas a encontrar su camino en tiempos difíciles. Cuando no está entrenando o escribiendo, se puede encontrar a Irene disfrutando del aire libre con su familia y amigos.