Cómo dejar de ser pegajoso en una relación: 23 consejos sin tonterías

Irene Robinson 04-06-2023
Irene Robinson

En este post, voy a mostrarte cómo puedes dejar de ser pegajoso en tu relación.

(Paso a paso)

De hecho, si sigues estos consejos, no sólo te sentirás menos dependiente de tu pareja, sino que además crearás una relación más sana.

Tenemos mucho que tratar, así que empecemos.

¿Estás siendo demasiado pegajoso y necesitado en tu relación?

Antes de poder trabajar en un problema, es necesario diagnosticarse primero.

El apego, la necesidad o la posesividad se manifiestan en comportamientos como:

  • Avanzar demasiado rápido en una relación
  • Sentir celos irracionales de las personas que forman parte de la vida de su pareja.
  • Mensajear excesivamente a su pareja
  • Supervisar constantemente la actividad de su pareja en las redes sociales
  • Descuidar a los amigos, la familia o incluso el trabajo para pasar tiempo con su pareja.

Muchas personas pueden no ser conscientes de que se trata de comportamientos negativos o se niegan a admitir que son pegajosas.

Aunque es natural querer a tu otra mitad y desear expresarlo, puede resultar malsano y asfixiante ser el único centro de atención de alguien.

¿Es su pareja lo único que da sentido a su vida?

Si es así, puede que tenga un problema.

El aferramiento es un signo de trauma emocional. Cuando las personas buscan la cercanía, el apoyo emocional o la seguridad constante de una fuente externa, podrían estar experimentando una baja autoestima o miedo al abandono.

Y seguir negándolo no mejorará la situación.

Una vez que hayas procesado y aceptado que te has vuelto pegajoso y necesitado, puedes tomar las medidas necesarias para cambiar tu comportamiento.

Cómo dejar de ser pegajoso y necesitado en una relación: 23 consejos

1) Identificar los comportamientos pegajosos

Reconocer que el aferramiento puede ser malsano es el primer paso para responsabilizarse de él.

No hay por qué avergonzarse de admitir que se está demasiado necesitado, porque probablemente haya razones válidas para ello.

Las buenas relaciones son valiosas y escasas, por lo que ser pegajoso puede significar que desea ser proactivo en el cuidado de su pareja, aunque en un grado ligeramente extremo.

Sin embargo, no está de más que tomes nota de qué comportamientos debes corregir exactamente para poder desaprenderlos.

Algunos hábitos pegajosos comunes son:

  • Acompañar a tu pareja a todas partes
  • Enfadarse si deciden ir a algún sitio sin ti
  • Hacer una serie de preguntas indiscretas
  • "Investigar" y seguir su paradero
  • Seguirles constantemente en las redes sociales
  • Obsesionarse con que su pareja le responda
  • Asustarse o suponer lo peor si no reciben noticias suyas inmediatamente
  • Aislarse de los demás para dedicar tiempo sólo a su pareja
  • Pérdida de interés por pasiones y aficiones anteriores
  • Sentir celos de compañeros de trabajo o amigos atractivos.
  • Sacrificar tu felicidad por la suya

Una vez que haya identificado exactamente lo que tiene que cambiar, le resultará más fácil modificar esos hábitos.

2) Obtenga asesoramiento específico para su situación

Aunque este artículo explora los principales consejos que puedes probar si eres pegajoso, puede ser útil hablar con un asesor sentimental sobre tu situación.

Con un coach de relaciones profesional, puede obtener consejos específicos para su vida y sus experiencias...

Relationship Hero es un sitio web en el que entrenadores altamente cualificados ayudan a las personas a superar situaciones amorosas complicadas y difíciles, como ser pegajoso en una relación. Son un recurso muy popular para las personas que se enfrentan a este tipo de retos.

¿Cómo puedo saberlo?

Me puse en contacto con ellos hace unos meses, cuando atravesaba una mala racha en mi propia relación. Después de tanto tiempo perdida en mis pensamientos, me dieron una visión única de la dinámica de mi relación y de cómo volver a encarrilarla.

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3) Deja que tu pareja sea libre con las siguientes acciones

Cuando alguien es más pegajoso de lo necesario, tiene la creencia inherente de que si se aferra más a su ser querido, tendrá menos probabilidades de perderlo.

Pero es hora de desechar esa teoría y hacer caso a las famosas palabras del escritor Richard Bach:

"Si amas a alguien, déjalo libre. Si vuelve, es tuyo; si no, nunca lo fue".

Con "libre" no nos referimos a poner fin a la relación. Libre en este caso significa confiar en la otra persona de la relación lo suficiente como para...

  • seguir con su día sin enviarte mensajes de texto varias veces cada hora (o sin que tú les envíes mensajes de texto a ellos)
  • conocer gente sin preocuparte de con quién están
  • tomar decisiones en su nombre sin que usted sienta una pérdida de poder
  • mantener la privacidad de sus redes sociales si lo desean
  • actúan de un modo que no comprendes, pero que no ves como una amenaza para ti.
  • Estar en contacto con sus ex parejas si surge la necesidad (por ejemplo, en caso de copaternidad o de acontecimientos familiares compartidos, como un fallecimiento) sin que usted se sienta celoso.

Todos estamos de acuerdo en que actuar es la mejor forma de inducir el cambio, así que empieza el proceso de ser menos pegajoso permitiendo que tu pareja haga lo anterior.

4) Aprenda a confiar en su pareja

Uno de los pilares de una relación sólida, sana y satisfactoria es la confianza.

Es decir, creer que la otra persona está de tu lado, con tu bienestar en el corazón.

Saber que están tan comprometidos como tú para que esta relación funcione, y que harán todo lo que esté en su mano para mantenerte feliz y a salvo.

En general, cuanto más confíes en el otro, menos ansiedad sentirás por tu relación.

A veces, la otra persona ha hecho o dicho algo que te ha hecho perder la fe en ella.

Por otro lado, tus experiencias vitales pueden haberte enseñado que confiar en los demás NO es una buena idea.

Sea como sea, si os falta confianza en vuestra relación, está claro que esta situación debe ser abordada por ambos.

¿La mejor manera de hacerlo?

A través de una conversación cara a cara sobre ello.

Si os comunicáis, podréis hablar de por qué tú (o tu pareja) sois demasiado pegajosos y qué podéis hacer al respecto.

Quizá sólo necesitéis aseguraros mutuamente que confiáis el uno en el otro, y luego establecer algunos límites (ya hablaremos de eso más adelante).

En tu conversación, debes tener 2 objetivos:

  1. Tu pareja es consciente de por qué sus acciones o palabras te han hecho perder la confianza.
  2. Se elabora un plan para evitar estas situaciones en el futuro.

5) Comprender cuáles son las consecuencias de un "aferramiento" extremo

Mito: El apego y la necesidad harán que tú y tu amante os unáis más.

Verán cuánto les quieres y te preocupas por ellos, así que se esforzarán por corresponderte, devolviéndote todo tu amor.

Si este es el mito que motiva tus intenciones, la realidad es que el aferramiento es contraproducente.

Tu pareja podría volverse complaciente contigo porque sabe que lo dejarás todo por ella.

Dejarían de esforzarse en construir la relación y disfrutarían de su poder sobre ti.

Mucho más probable (y menos siniestro) es que tu pareja se sienta presionada porque esperas que satisfaga tus necesidades emocionales.

Se sentirían asfixiados al pensar que son tu única fuente de vida y felicidad.

En lugar de quedarse contigo, se sentirán atrapados e intentarán escapar.

Recuerda que tú eres sólo una parte de su vida, no su vida entera, y lo contrario también es cierto.

Tener planes, objetivos y sueños propios hace que la relación sea más fácil para tu pareja, porque no tiene que mimarte todo el tiempo.

6) Establezca y respete los límites con su pareja

El secreto para vencer tus miedos es sencillo: enfréntate al miedo y comprueba lo inútil que es.

Puede que no te guste, pero tu pareja tiene una vida lejos de ti.

Es un hecho que a muchas personas pegajosas les cuesta aceptar.

No quieren que su pareja vaya a cenar con amigos, al cine o a un bar, al menos sin ellos.

Hay que dar espacio a la pareja y establecer límites para dejar espacio a las vidas que se tenían antes de que el otro entrara en escena.

Permíteles la oportunidad de ser otra persona porque no existen principalmente para desempeñar el papel de tu novio o novia.

Establece reglas como:

  • Llamar sólo una vez al día
  • Permitirles tiempo "para mí" dos veces por semana
  • Prohibición de consultar sus cuentas en las redes sociales

Pequeños límites como éste les darán la oportunidad de echarte de menos y te recordarán que no sois gemelos unidos por la cadera.

Lectura recomendada: Cómo darle espacio (y evitar perderle): 10 consejos eficaces

7) Deja el teléfono

Érase una vez, que era mucho más fácil no ser cliché.

Como no era fácil llamar por teléfono fijo y no había correo electrónico ni redes sociales, las parejas se ponían al día por la noche.

Los comportamientos pegajosos, como comprobar nuestros teléfonos para ver si nos responden los mensajes, son puramente cosa del siglo XXI.

En lugar de permitir que tu pareja se centre en su día o disfrute de un tiempo de inactividad, buscas su atención enviándole mensajes de texto, llamándole o bombardeándole con fotos, enlaces a artículos y correos electrónicos.

Las interminables conversaciones de ida y vuelta no te dejan nada nuevo que compartir una vez que os veis en la vida real.

En otros casos, es posible que desee comprobar en las redes sociales de su pareja para ver si se están divirtiendo o haciendo cosas sin ti a

¿Puedes creer que hubo una vez en un pasado no tan lejano... hace sólo 30 años más o menos...?

Los socios salían de casa por la mañana para ir a trabajar, ¡y no estuvieron en contacto en absoluto hasta que volvieron a casa por la noche!

En aquella época no había (o había muy pocos) teléfonos móviles. Los centros de trabajo prohibían generalmente las llamadas personales en horario laboral, a menos, claro está, que se tratara de una emergencia.

Esto significaba que durante 8-10 horas cada día, los socios no se veían, hablaban o charlaban entre sí. Como resultado, tenían un descanso el uno del otro... y tenían algo de qué hablar durante la cena -el clásico: "¿Cómo te ha ido el día?".

¿Con qué frecuencia estáis en contacto telefónico en vuestra relación? ¿Es excesivo?

Compruébalo eligiendo un periodo de 24 horas. Lleva la cuenta de TODAS las veces que estás en contacto con el otro de forma proactiva (no reactiva, como responder con un comentario corto o un emoji).

Esto incluye no sólo la voz y el chat, sino también el envío de imágenes, el reenvío de cosas y la publicación de enlaces.

Durante el mismo periodo de 24 horas, lleva la cuenta de TODAS las veces que el otro se puso en contacto contigo de forma proactiva.

Veamos los números de contacto proactivos para tu periodo de 24 horas. ¿Cuánta diferencia hay entre los dos números? En otras palabras, ¿cuánto MÁS estás tú en contacto de lo que el otro está en contacto contigo?

Si la diferencia es superior a 5, deberías plantearte reducirla.

Por ejemplo, en un periodo de 24 horas tú estás en contacto proactivo con el otro 25 veces y el otro está en contacto proactivo contigo 16 veces.

Esta diferencia de 9 veces puede ser la razón por la que te ven como "pegajoso", aunque tú lo veas como algo cariñoso y que demuestra que les echas de menos.

Y eso tampoco es sano.

La próxima vez que sientas el impulso de ponerte en contacto con tu pareja, intenta esconder el teléfono o dáselo a un amigo para que no tengas la tentación de usarlo.

Reduce al mínimo el tiempo que pasas delante de la pantalla y presta más atención a lo que ocurre a tu alrededor.

8) Manténgase ocupado

El aferramiento se convierte en un problema para las personas que ponen a su pareja en el centro de su vida y nada más.

En lugar de esperar que tu pareja te entretenga y llene de actividad tus horas de vigilia, deberías ser tú quien encontrara algo más que hacer.

Aquí tienes algunos buenos ejemplos de cómo mantenerte ocupado y recuperar tu individualidad:

Pasa más tiempo con la familia y los amigos: Antes de conocer a tu pareja ya había personas en tu vida y, a menudo, son las que permanecen una vez que se produce la ruptura. Vuelve a conectar con tus padres, hermanos y amigos a propósito. No les invites a salir contigo sólo para cancelar los planes cuando tu pareja decida que debéis tener una cita.

Viaja sin tu pareja: tanto si organizas un viaje al extranjero con tus amigos como si planeas pasarte por una ciudad cercana para probar un restaurante, viajar sin tu pareja puede reforzar tu sentido de la identidad. Además, la ausencia hace que el corazón se vuelva más cariñoso.

Meditar o hacer ejercicio: las actividades de atención plena y el ejercicio físico pueden hacer mucho por el estado general de tu salud. Permitir que tu mente y tu cuerpo se alejen de tu pareja puede refrescarte y conectarte con lo que eres como persona.

Descubre aficiones e intereses: Cuando entraste en una relación, puede que descuidaras cosas que te apasionaban o te olvidaras de dedicarte a algo que te parecía divertido. Si estás trabajando activamente contra tu propia aferramiento, las nuevas aficiones e intereses te ayudarán sin duda a despejar la mente de tu pareja.

9) Minimizar el apego físico

El lenguaje corporal se utiliza a menudo para comunicar afecto, como cogerse de la mano o abrazarse.

Sin embargo, tocar constantemente a tu pareja puede resultarle incómodo. Puede que no te lo diga, pero podrías estar invadiendo su espacio físico.

Dale a tu pareja espacio para respirar estableciendo un horario de no contacto.

Tal vez podáis prometeros no veros ni tener una cita durante una semana. O, si planeáis quedar, evitad tocaros durante el mayor tiempo posible.

Si tú y tu pareja vivís juntos, intentad fijar un horario en el que ambos estéis en distintas partes de la casa.

Uno de los dos puede quedarse en el dormitorio mientras el otro descansa en el salón. También puedes utilizar carteles de "No molestar" cuando quieras que te dejen solo.

10) Anime a su pareja a desarrollar sus propios intereses

Es fácil olvidarse de uno mismo cuando se está enamorado. Antepones las necesidades de tu pareja a las tuyas y le dedicas todo tu tiempo.

A la larga, esto genera resentimiento en ambas partes. Puede que tengan aficiones o intereses que abandonaron para poder pasar su tiempo libre contigo.

O quizá descuidaron a sus antiguos amigos en favor de pasar más tiempo con otras parejas con las que entablaron amistad.

Si intentas combatir el apego, es importante que fomentes la autoestima de tu pareja.

Permítales renovar o perseguir sus pasiones en la vida.

Ver también: 13 razones por las que no puedes dejar de pensar en él (& 9 maneras de dejar de hacerlo)

No les hagas sentirse culpables si pasan más tiempo lejos de ti o dejan de contestarte a los mensajes.

Este es un aspecto clave del instinto de héroe. Ya he mencionado este concepto más arriba.

Historias relacionadas de Hackspirit:

    Cuando se anima a un hombre a perseguir sus intereses, es mucho más probable que se comprometa contigo y con vuestra relación.

    Porque la relación en realidad le está ayudando a ser la mejor versión de sí mismo.

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    11) Desarrolle su red social

    Cuando estás en una relación pegajosa, te darás cuenta de que tu pareja es probablemente la única persona a la que ves hoy en día.

    Si es así, es hora de hablar con otras personas y darse un respiro social de la compañía de su pareja.

    Intenta hacer algo por tu cuenta como:

    • Comparta una comida con su grupo de amigos
    • Apúntate a un club o a una clase
    • Participar en una noche de chicas/chicos
    • Visita a tus padres
    • Invita a un conocido a tomar un café.

    12) Tómese las nuevas relaciones con calma

    Aferrarse a una persona con la que acabas de empezar a salir es un mecanismo de defensa contra el rechazo.

    Temes que rompan la relación, así que actúas de la forma más agresiva posible para que no te dejen ir.

    Sin embargo, mover la relación demasiado rápido probablemente sólo les asustaría y les haría huir.

    Relájate y tómatelo con calma. Debes saborear la oportunidad de conocer a alguien nuevo, no precipitarte y exigir un compromiso.

    Si necesitas más ayuda con esto, te sugiero que consultes con los expertos.

    Para mí, Relationship Hero es el mejor recurso de coaches amorosos que no son mera palabrería. Lo han visto todo, así que lo saben todo sobre cómo abordar situaciones amorosas difíciles.

    Personalmente, los probé el año pasado mientras yo también soportaba una crisis dolorosa. Lo mejor es que consiguieron salir del ruido y me dieron soluciones reales.

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    13) Evite mimar a la gente

    Cuando nacen los niños, algunos padres adoptan la noción de que tienen que estar a su lado 24 horas al día, 7 días a la semana, para poder cuidarlos, dando lugar al término "padre helicóptero".

    Del mismo modo, una persona pegajosa tiende a pensar que su pareja la necesita de verdad, por lo que se queda a su lado e intenta ayudar a su pareja, aunque en realidad no la necesite. Es una situación frustrante para todos.

    Es un buen momento para recordar y respetar el hecho de que tu pareja es un adulto, perfectamente capaz de atender sus propias necesidades físicas, mentales y emocionales.

    Si necesitan tu ayuda, te lo harán saber, así que no les mimes. Es mejor dejar de pensar que su vida estaría incompleta sin tu atención o tus consejos.

    14) Aumenta tu confianza y autoestima

    Las personas pegajosas suelen tener una baja autoestima. Como son inseguras y temen ser abandonadas, se vuelven pegajosas o necesitadas de validación por parte de sus parejas. Si sientes que eres una persona con baja autoestima, deberías intentar buscar cosas que aumenten tu confianza, como realizar un proyecto por tu cuenta.

    Encuentra un propósito al que puedas dedicarte y cultiva tus pasiones fuera de la relación. Cuando aprendas a respetarte y quererte a ti mismo, los demás también lo harán, pero para entonces ya no los necesitarás necesariamente para sobrevivir o ser feliz.

    15) Trabaja en tus problemas de ansiedad, celos o confianza.

    Problemas internos como la ansiedad, los celos o los problemas de confianza pueden hacer que te autosabotees en tu relación y que, en lugar de disfrutar de la compañía de tu pareja, acabes preocupándote por los "y si..." e iniciando peleas innecesarias con ella.

    Quizá te preocupa su infidelidad o no tienes suficiente fe en la fuerza de vuestra conexión.

    Sea lo que sea, tienes que abordar tus problemas para poder disfrutar de una relación sana.

    En la medida de lo posible, canaliza tus ansiedades y sospechas hacia algo productivo para que, incluso si esos "y si..." ocurren en el futuro, tu felicidad no esté atada a una sola persona.

    16) Practicar la autosuficiencia

    Depender de tu pareja para cubrir tus necesidades físicas, mentales, sociales, emocionales o incluso económicas supondría cargarle con más responsabilidad de la justa en la relación.

    Es hora de deshacerse de la idea de que tu pareja es tu otra mitad y de que estás incompleto sin ella.

    Centra tus pensamientos en ti mismo y constrúyete desde dentro para que puedas responsabilizarte de tu propia felicidad.

    Lo mejor de practicar la autosuficiencia es poder compartir una versión más rica de ti mismo con tu pareja.

    17) Evitar las tendencias controladoras

    Cuando se combinan la necesidad, el miedo, la obsesión y la desesperación, suelen manifestarse como comportamientos controladores, pero ninguna de estas cosas contribuye al amor ni a la felicidad.

    Lo cierto es que no puedes controlarlo todo sobre tu relación y la vida de tu pareja.

    Son su propia persona y pueden tomar sus propias decisiones.

    Lo único sobre lo que tienes control es sobre ti mismo y sobre cómo reaccionas ante lo que suceda a continuación.

    Aceptar que ninguno de los dos sois perfectos y que los errores ocurren de forma natural os ayudará a sentiros menos presionados para ejercer el control sobre todo.

    18) Aprender a estar solo

    Cuando las personas están en una relación, permiten que su pareja las ame hasta el punto de no sentir la necesidad de amarse a sí mismas.

    A su vez, descuidan su crecimiento y desarrollo personal. La ansiedad, el resentimiento y la desesperanza se instalan una vez que se pierden en la relación y olvidan valorar su individualidad.

    El remedio a este problema es dedicarse tiempo a uno mismo y aprender a disfrutar de la soledad.

    Haz lo que te llene y te mantenga ocupada, de modo que no dependas de tu pareja para sentirte identificada.

    Engáñate a ti mismo para que te guste el tiempo a solas haciendo las cosas que normalmente no podrías hacer si tu pareja está cerca.

    Disfruta de una comida que te encanta (y que a ellos no les gusta) o ve una película que tenías ganas de ver (y que ellos no).

    O simplemente baja la "guardia social", empápate de tranquilidad y reflexiona sobre tu vida.

    Si lo hace, fomentará un entorno emocional positivo porque usted y su pareja persiguen juntos su independencia.

    Seréis testigos del crecimiento del otro, os presentaréis a gente nueva y compartiréis historias interesantes de las cosas que habéis vivido por separado.

    Lectura recomendada: Cómo ser feliz solo: 7 consejos para encarrilar tu vida

    19) Averigua qué "estilo de apego" tienes

    La teoría del apego es una teoría psicológica que describe la naturaleza del apego emocional entre los seres humanos.

    Según los psicólogos, los adultos pueden adoptar 4 estrategias de apego diferentes.

    Lo son:

    Estilo de apego seguro: Personas que se sienten cómodas mostrando interés y afecto. También se sienten cómodas estando solas.

    Estilo de apego ansioso: Estas personas necesitan que su pareja les dé seguridad y afecto constantemente. Suelen tener problemas para estar solas o solos.

    Estilo de apego evitativo: Estas personas se sienten incómodas con la intimidad y son extremadamente independientes. Suelen tener problemas de compromiso y se sienten asfixiadas cuando la gente se les acerca demasiado.

    Si estás interesado en hacer un test para averiguar qué estilo de apego tienes, haz clic aquí para realizar una prueba.

    Si eres demasiado pegajoso en tus relaciones, es probable que tengas un estilo de apego ansioso.

    La buena noticia es que tu estilo de apego puede cambiar con el tiempo, aunque no sin esfuerzo.

    Los psicólogos han teorizado que el estilo de apego se corresponde con el grado de imagen positiva/negativa de uno mismo y de imagen positiva/negativa de los demás.

    Por lo tanto, si eres del estilo de apego ansioso, puedes trabajar para crear límites sanos y fomentar una imagen saludable de ti mismo.

    Encuentra algo que te apasione, hazlo bien y conviértelo en el centro de tu vida, en lugar de tu pareja.

    Si eres del tipo evasivo, puedes trabajar para abrirte a los demás. Un gran consejo para las personas del tipo evasivo es que encuentres algo bueno en todas las personas que conozcas. Sé curioso y deja de juzgar.

    Pero recuerda que primero tienes que averiguar qué estilo de apego tienes. Una vez que lo sepas, podrás trabajar en el cambio.

    20) ¿Eres pegajoso porque los necesitas en tu vida?

    Una razón común por la que una pareja puede ser excesivamente pegajosa es que no tiene suficientes recursos para llevar una vida básica, y depende de su pareja para que le proporcione esos recursos.

    En estos casos, la persona se aferra a la otra como medio de sustento económico.

    A veces ocurren cosas difíciles. Puede ser que estés estudiando a tiempo completo y no tengas un momento libre para trabajar.

    Tal vez padezca un problema físico temporal que le impide trabajar por completo o sólo parcialmente.

    En estas circunstancias, date cuenta de que tu situación es temporal. En algún momento, te graduarás. Tus estudios te proporcionarán un mayor poder adquisitivo. Con el tiempo, tu buena salud volverá, lo que te permitirá volver a trabajar a tiempo completo.

    Intenta que esta comprensión te aporte paz y calma.

    A continuación, examina de nuevo tu relación financiera con el otro.

    ¿Puede hacerse de forma que se reduzca la pegajosidad?

    Tal vez un presupuesto semanal o mensual podría ayudarte, transfiriendo los fondos a tu propia cuenta bancaria, lo que te daría cierta independencia.

    De este modo, no tendrás que pedir hasta el último céntimo, con lo que te sentirás (y parecerás) totalmente pegajosa.

    Entonces, ¿por qué no ganas dinero? ¿Por qué has elegido esta opción? ¿Te gusta que te cuiden? ¿Te sientes algo perezoso?

    Todos queremos descansar del trabajo de vez en cuando, a veces durante bastante tiempo. Sin embargo, debemos darnos cuenta de que nuestro "descanso laboral" es nuestra elección.

    Nuestras parejas, amigos y familiares no deben sufrir nuestro aferramiento como consecuencia de nuestra decisión.

    Ya que tienes el control, cambia tu situación si está causando estrés en tu(s) relación(es).

    En general, siempre hay trabajo legal si alguien se lo toma en serio. Puede que no sea en tu profesión. Puede que no sea al nivel salarial al que estás acostumbrado. Puede que requiera cierta formación adicional, pero estarás ganando un sueldo y te sentirás (y parecerás a los demás) menos dependiente y pegajoso.

    21) Intenta no depender de tu pareja para tu propia autoestima

    Tener poca (o ninguna) "riqueza" personal significa creer que no valemos nada, que no tenemos valor, que no somos importantes.

    Como nos sentimos vacíos, nos aferramos a los demás para "llenarnos". Por ejemplo, sentimos que no somos queribles, así que nos aferramos a nuestra pareja buena o mala porque ¿quién más nos querría?

    Es hora de aumentar la confianza en uno mismo, la autoestima y la valoración personal.

    Una forma eficaz de hacerlo es sacar algunos huevos de la "cesta de las relaciones".

    Lo más probable es que te hayas definido en gran parte (o quizá completamente) por tu relación de pareja.

    Así que tiene sentido ser pegajoso porque sin esta relación, ¿quién eres? ¿Qué te queda?

    La necesidad excesiva conduce al apego, y ninguna de las dos cosas es atractiva.

    He aquí otras "cestas" en las que poner los huevos:

    • Pasar más tiempo con la familia y los amigos.
    • Viaja, sobre todo por tu cuenta: verás lo autosuficiente que puedes llegar a ser.
    • Haz un curso o inicia una afición.
    • Dar voluntariamente a los demás acaba siendo un regalo para nosotros mismos.

    22) Crea más espacio entre tu pareja y tú

    Incluso en las relaciones más sólidas y amorosas, la pareja necesita tiempo para separarse.

    Como mencionamos anteriormente en la sección del teléfono, ser "sin contacto" en los viejos tiempos era una forma de conseguirlo de forma natural.

    Hoy en día estamos acostumbrados a estar en contacto mucho más a menudo, así que, por el bien de las buenas relaciones, tenemos que crear conscientemente un "tiempo aparte".

    Ver también: Lo que realmente quiere decir un hombre cuando dice "no sabe lo que quiere"

    Limitar el contacto telefónico

    Podrías pasar a "ningún contacto" durante la jornada laboral o limitar los contactos proactivos a un número bajo. En efecto, estarías actualizando un hack de la vieja escuela. Es fácil de hacer y no te cuesta nada.

    Juntos a solas

    Para parejas que comparten casa...

    1. Programe un tiempo en el que cada uno ocupe distintas partes de la residencia SIN estar en contacto en absoluto. Por ejemplo, de 9 a 10 de la mañana todos los sábados, usted está en el jardín y su pareja en la cocina.
    2. Utiliza un cartel de "no molestar". Sí, el mismo que en los hoteles. Cuando la persona cuelga el cartel en el pomo de la puerta de una habitación y cierra la puerta, no se le puede molestar (ni siquiera por teléfono) a menos que haya una emergencia justificada. Asegúrate de utilizar también esta opción, aunque creas que no la necesitas, para dar un poco de espacio a tu pareja.

    Hazlo tú mismo

    No es necesario que siempre te acompañe alguien cuando vas de compras, tomas una clase de yoga/pilates, vas al cine, comes fuera, paseas por la playa, vas al gimnasio, etc.

    ¿Es más agradable estar juntos? Claro, pero tú eres un adulto, y los adultos saben hacer las cosas por sí mismos cuando es necesario... y es necesario, para que tu pareja/el otro tenga espacio para respirar.

    Noches fuera

    Esta es la popular sugerencia de "noche de chicas / noche de chicos". La idea aquí es que cada uno de vosotros pueda salir sin el otro de una forma no amenazadora. Significa que no dependéis el uno del otro para pasar una noche divertida.

    Si no tienes una "tribu" porque te has aferrado exclusivamente a la otra persona de la relación, vas a tener que construir una. Es más fácil de lo que crees.

    Muchas personas que conoces estarán dispuestas a ser amigos ocasionales contigo. No estás pidiendo un gran compromiso, sólo hacer algo agradable juntos de vez en cuando. z

    Te sorprenderá saber cuánta gente busca también una tribu.

    23) Consultar con un terapeuta

    Las parejas tienden a pensar en la terapia como un último esfuerzo desesperado cuando la relación se va a pique.

    Sin embargo, la terapia de pareja puede ser muy beneficiosa tanto si asisten juntos como si lo hacen solos.

    Un terapeuta puede ayudarle a resolver activamente los problemas que aquejan a su relación, lo cual es mucho mejor que limitarse a desear que el problema desaparezca.

    Aunque hablar con su pareja puede funcionar en algunos casos, también puede resultar algo difícil recurrir a esta solución.

    La inseguridad no es la única causa del aferramiento; los comportamientos de tu pareja podrían haber contribuido en gran medida.

    Tal vez se haya producido una traición o uno de los miembros de la pareja tenga motivos para dudar del amor de la otra persona.

    La terapia puede ser eficaz porque le pides a una persona externa, objetiva y sin prejuicios que te ayude a desenmarañar tus malentendidos y a encontrar soluciones adecuadas a tu situación particular.

    Los resultados

    Si conoces tu estilo de apego y decides hacer cambios, dejarás de ser tan pegajoso.

    Esto es mejor para ambas partes. Te sentirás más capacitada e independiente. Tu autoestima aumentará y tu imagen de ti misma mejorará.

    La otra persona de la relación no se sentirá tan "ahogada" y arrastrada por tu necesidad.

    Podrán verte como la persona que les atrajo en primer lugar.

    En general, estos cambios ayudarán a fortalecer su relación y a cambiarla de forma positiva.

    ¿Puede ayudarte también un asesor sentimental?

    Si desea asesoramiento específico sobre su situación, puede resultarle muy útil hablar con un asesor sentimental.

    Lo sé por experiencia propia...

    Hace unos meses, me puse en contacto con Relationship Hero cuando estaba pasando por una mala racha en mi relación. Después de haber estado perdida en mis pensamientos durante tanto tiempo, me dieron una visión única de la dinámica de mi relación y de cómo volver a encarrilarla.

    Si aún no conoces Relationship Hero, se trata de un sitio web en el que asesores altamente cualificados ayudan a las personas a superar situaciones amorosas complicadas y difíciles.

    En sólo unos minutos puedes ponerte en contacto con un coach relacional certificado y obtener asesoramiento personalizado para tu situación.

    Me sorprendió lo amable, empático y realmente servicial que era mi entrenador.

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    Irene Robinson

    Irene Robinson es una entrenadora de relaciones experimentada con más de 10 años de experiencia. Su pasión por ayudar a las personas a navegar a través de las complejidades de las relaciones la llevó a seguir una carrera en consejería, donde pronto descubrió su don para los consejos prácticos y accesibles sobre relaciones. Irene cree que las relaciones son la piedra angular de una vida plena y se esfuerza por empoderar a sus clientes con las herramientas que necesitan para superar los desafíos y lograr una felicidad duradera. Su blog es un reflejo de su experiencia y conocimientos, y ha ayudado a innumerables personas y parejas a encontrar su camino en tiempos difíciles. Cuando no está entrenando o escribiendo, se puede encontrar a Irene disfrutando del aire libre con su familia y amigos.